Por Expedia Team, el December 10, 2014

Haz de Alaska tu próximo destino

Alaska es uno de los lugares más originales para visitar. Lo primero que hace atractivo a este lugar es que es el estado más grande de Estados Unidos con más de medio millón de millas cuadradas, nueve cordilleras y tres mil ríos. Esta región norteña tiene mucho que ofrecer y resulta novedosa y fascinante para quienes no estamos familiarizados con el área. Los campos de hielo cubren aproximadamente el cinco por ciento de la superficie del estado. Además, los amantes de la naturaleza podemos gozar de los bosques, lagos, glaciares, mares circundantes y las islas que atraen a visitantes de todo el mundo cada año.

Llegar a Alaska en crucero

Si te gusta vivir en el agua, tomar un crucero es la alternativa perfecta. Estos suelen durar una semana y te permiten conocer Vancouver, Columbia Británica y Anchorage, Alaska. Esta alternativa es una de las más populares y te quedará clara la razón cuando comiences a ver los increíbles paisajes que el mar y el clima helado te ofrecen. Hay dos tipos de crucero, los que van siguiendo la costa y los que se alejan un poco de la misma. Durante la excursión podrás visitar la isla Kodiak y ver a los osos Kodiak en su territorio nativo, además de focas, morsas y fauna propia del clima.

¿Qué se puede ver en Alaska?

Una vez que llegamos a este estado podemos darnos un tiempo para ver algunos de los museos locales y aprender de quienes aquí viven en Juneau, la capital del estado. Si prefieres pasar directamente a la aventura y llegar tan al norte como es posible, debes dirigirte a Barrow, que está a 1.300 millas desde el Polo Norte. Aquí solo debes tomar en cuenta que las regiones norte y oeste del estado no son altamente pobladas y hay pocas carreteras en algunos tramos por lo que se recomienda contratar los servicios de un guía turístico.
En Barrow puedes ver el desierto de hielo ininterrumpido que sigue siendo salvaje y sin alteraciones por el ser humano. Podrás caminar los senderos del parque, pisar un glaciar con la ayuda de un helicóptero y disfrutar de descanso con vistas desde picos que tienen entre 17 y 20 metros de altura y que son los más grandes de Estados Unidos.

Otras actividades que puedes hacer

Aunque las vistas desde los picos son increíbles, estoy segura de que no querrás limitarte a ellas. Aquí puedes hacer excursiones a parajes que pocos han visto o navegar en kayak o canoa por alguno de los innumerables ríos. Ya sea que prefieras rápidos que te llenen de adrenalina o un paseo en aguas tranquilas, encontrarás un río que se adapte a ti.
También se pueden disfrutar platillos típicos de la zona en muestras gastronómicas que se realizan en las ciudades más grandes y tomar un tour de ciclismo para conocer la zona con mayor tranquilidad. En Alaska lo podemos encontrar todo: comida gourmet, descanso, ejercicio, deportes, historia y vida silvestre. Incluso cuando tus vacaciones terminan, puedes seguir disfrutando de la belleza natural del lugar si tomas el viaje en tren para regresar a casa o ver increíbles panorámicas desde el avión.